El storytelling es el arte de contar historias.
Como seres humanos contamos historias siempre. Cuando compartimos una anécdota, cuando presentamos un nuevo proyecto e incluso, cuando escribimos un tuit.
Hoy sabemos que historias hay muchas, pero grandes historias, historias memorables… de esas no hay tantas.
¿Qué hace una historia memorable? La primera respuesta es simple: una historia es memorable por cómo la contamos. Y si queremos que la forma de contarla se vuelva inolvidable.
[/et_pb_text][et_pb_text _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»]Tabla de contenidos
Qué es el storytelling
El storytelling es una estrategia mediante la cual contamos una historia para conseguir un determinado fin: informar, motivar, conocer opiniones, vender… Las redes sociales son un canal de comunicación más directo e inmediato. En él, los usuarios además de informarse sobre los productos de la compañía exponen sus dudas, quejas, comentarios etc, favoreciendo el feedback entre ambos.
La venta es precisamente la acción que más dificultad presenta para las compañías. ¿Cómo lograr que los usuarios no se sientan invadidos y se marchen? ¿Son las redes sociales un buen medio para contar historias?
[/et_pb_text][et_pb_text _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»]Storytelling: el arte de comunicar contando historias
No hay que confundir storytelling con hablar sobre qué hace nuestra marca o qué ofrecemos. Lo más relevante de esta técnica es que las empresas cuenten historias de valor, que sean interesantes para los usuarios y que les aporte algo más que un contenido meramente corporativo. Se trata de crear emoción y un vínculo con quienes te están leyendo a través de las redes sociales, no hay que limitarse a transmitir un mensaje.
El storytelling hace posible que el usuario se cree en su mente la historia que le están contando. Si por ejemplo le cuentas a alguien cómo ha sido tu último viaje, dándole detalles de tu experiencia y de cómo te sentiste (no sólo de a dónde fuiste y qué pudiste ver), el receptor acabará percibiendo esa sensación e incluso acabará recordándola a largo plazo.
[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][et_pb_row _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»][et_pb_column type=»4_4″ _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»][et_pb_text _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»]4 pasos que son claves para hacer un storytelling estratégico
Paso 1: El viaje (Research)
Antes de contar una historia debemos conocer a quién se la vamos a contar. Aquí iniciamos el viaje al mundo de nuestra audiencia: investigando cómo es, qué le interesa, qué siente, cómo piensa, cómo se comporta y el por qué.
Esto nos ayudará a descubrir lo que realmente quiere y le interesa que le contemos.
Paso 2: La gran idea (Insight)
Todo storytelling poderoso nace de una gran idea, este es el argumento: aquello de lo que trata nuestra historia.
Un argumento puede partir de la verdad más obvia, de algo cotidiano, pero se convierte en un gran argumento hasta que lo conectamos con nuestra audiencia, profundizando en su comportamiento, aspiraciones y experiencias, y le agregamos emociones.
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Paso 3: Los 3 actos (Strategy)
Aristóteles propuso que todo relato que busque conectar con la gente y cautivarla parte de una estructura básica de 3 actos: planteamiento, nudo y desenlace. Es a partir de esta estructura que desarrollamos el argumento.
-Planteamiento: Presenta al protagonista de la historia, su mundo, lo que quiere lograr y el por qué quiere lograrlo.
Desde el planteamiento damos a nuestra historia un tono y emociones específicas (humor, tristeza, inspiración, curiosidad), que debemos ir desarrollando, durante todo el relato, con la ambientación y puesta en escena de la historia, pero principalmente, a través de nuestro protagonista.
Una guía para construir un protagonista con quien fácilmente la audiencia se identifique es que sus miedos, aspiraciones y experiencias sean similares y nazcan de lo que conocemos de la audiencia misma.
-Nudo: Aquí aparecen los retos a los cuales se enfrenta el protagonista, su lucha por conseguir lo que anhela, el gran conflicto.
Para que nuestra historia impacte es esencial darle un conflicto interno (entorno emocional del protagonista) y un conflicto externo (propio de su entorno físico).
-Desenlace: Es el cierre, cuando conocemos si nuestro protagonista logra su meta o no.
Para que la experiencia a partir de nuestra historia sea inolvidable, el clímax (último desafío al que se enfrenta el protagonista) debe responder todas las expectativas y dudas que se formaron desde que la historia inició.
Paso 4: El motor creativo: (Creative)
El motor creativo termina de definir el cómo contamos nuestra historia para que se vuelva memorable.
El argumento, los personajes, la ambientación, la estructura y el formato de la narración son elementos donde debemos explotar nuestra creatividad y ser innovadores.
[/et_pb_text][/et_pb_column][/et_pb_row][et_pb_row _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default» custom_padding=»0px|||||»][et_pb_column type=»4_4″ _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»][et_pb_text _builder_version=»4.9.2″ _module_preset=»default»]Cómo incorporar el Storytelling en tu estrategia de social media
Para conseguir crear interés y conectar con los usuarios de redes sociales, en tu Storytelling debes seguir estos consejos:
Cuenta tu día a día.
Un aspecto que valoran mucho los clientes gira en torno a todo aquello que sucede a diario en tu empresa y que no le prestas atención.
Identificación.
Si vamos a contar una historia sobre algún miembro del equipo o pretendemos lanzar una nueva campaña, mostrar a su creador ayudará a captar la atención. Los usuarios quieren ponerle cara a quienes forman parte de la marca a la que siguen a través de Facebook o Twitter.
Crea historias originales.
Sigue el esquema tradicional: planteamiento, nudo, desenlace. Dale vida a tu narración para llegar a los usuarios, haz que se emocionen y se interesen por lo que estás contando.
Interésate por tu audiencia.
Como señala Peter Guber, es mejor interesarse por conocer cómo es nuestro público y qué intereses tienen que hacerse el interesante. Si sabemos cómo se comportan en redes sociales, podremos definir mejor nuestras historias y conseguir nuestro objetivo.
Provoca interés.
No te limites a contar una sola historia y cerrarla. Haz que los clientes quieran saber más, que tengan ganas de volver para saber qué pasa. Utiliza avances, dale razones para que vuelvan.
Feedback.
Las redes sociales permiten una comunicación en doble sentido. Aunque cuentes la historia ellos también pueden participar y contarnos su propia vivencia con nuestra marca. Esto mejorará el engagement y traerá a más clientes.
Usa diversidad de formatos.
Vídeo, música, texto… Internet y las redes sociales ofrecen muchos formatos y canales con los que comunicarnos. Descubre cuál prefieren y lánzate.
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